Pensemos en una explosiva mezcla de golpe de caderas, patada al aire, rizos dorados y singular timbre afinado a golpe de OT. ¿Necesitamos más pistas? Así es, David Bisbal nos visita el próximo sábado 1 de septiembre. El almeriense, no apto para todos los gustos, cuenta con incontables seguidores que han adquirido el 100% de las localidades dispuestas en el Auditorio Alfredo Kraus.
David Bisbal se suma a la moda, impuesta en tiempos de crisis, de buscar una atmósfera íntima en salas con aforos controlables y generando un ambiente cercano, que al mismo tiempo les permite reducir costes.
Así, en febrero de 2011, Bisbal, con diez años de carrera en solitario, rompía la baraja y anunciaba en rueda de prensa el arranque de esta gira acústica por auditorios y teatros de calado nacional. La gira, que comenzó en abril del pasado año, en el Gran Teatre del Liceu de Barcelona, llega este sábado al Auditorio Alfredo Kraus, con la idea de poner sobre el escenario la voz de Bisbal, tan sólo acompañada de guitarras acústicas y españolas, piano, contrabajo e instrumentos de viento y percusión.
David Bisbal, con cuatro álbumes en solitario, Corazón Latino, Bulería, Premonición y Sin Mirar Atrás, y más de 50 premios nacionales e internacionales, entre los que destacan un Grammy Latino, dos Premios Ondas y varios Billboard Latin, ofrece en su gira acústica un repertorio revisado de sus temas con arreglos inéditos adaptados al nuevo formato. Una versión más modesta de sus grandes conciertos, que sin embargo no mermará en cuanto a calidad musical.
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